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Mostrando entradas de marzo, 2018

Jesús cuenta Su Crucifixión

Jesús cuenta Su Crucifixión   “Fui abandonado por todos los que me amaban”                 Por Eduardo Correa ¿Es   sorprendente? Sin lugar a dudas. Y es que conocemos La Pasión de nuestro Señor a través de los   Evangelios, no obstante, Su mensajera de estos tiempos, la egipcia Vassula Rydén, recibió del propio Jesús su versión. Veamos:         (9-11-86) -“La paz esté contigo. Estoy aquí. Yo soy Jesucristo. Estoy delante de ti. Soy tu maestro y te amo. El mal fue vencido por Mi Sacrificio. No os durmáis, porque Yo vengo pronto. Yo soy la Revelación. Yo tengo novedades que os harán reflexionar. Háblame de Mi Crucifixión, Vassula”.      -“Pero, ¿Qué debo decir? ¿Debo pensar en Tu crucifixión o en todo lo que la precedió? –En lo que pasó antes. Jesús me mostró, entonces, una imagen de la flagelación. –Cuando me flagelaron, Me escupieron y Me dieron tantos y tan violentos golpes en la cabeza, que Me dejaron aturdido. Me dieron patadas en el estomago que Me c

Discurso sobre JOSÉ ANTONIO PÁEZ, Por Eduardo Correa

Discurso sobre José Antonio  Páez, El Centauro de los Llanos, el día de su natalicio.       En cinco actos                                              Por   Eduardo Correa   ACTO PRIMERO: José Antonio Páez   es reconocido como uno de los grandes personajes con que cuenta la historia patria, y sus hazañas guerreras han sido contadas por propios y extraños.   Ahora cuando se están cumpliendo 224 años de su natalicio, detengámonos un poco en algunas de sus facetas. HAGAMOS UN POCO DE HISTORIA: A finales del siglo XVIII, en un rincón agreste de las llanuras de Portuguesa, en Acarigua, se alzaba una modestísima casa, en donde un 13 de junio de 1790, vino al mundo el que sería, andando el tiempo, el General José Antonio Páez. Juan Victorio Páez y María Violante Herrera fueron sus padres y en la iglesia parroquial de aquel pueblo recibió las aguas bautismales. Su fortuna era escasísima. A los ocho años de edad fue enviado a la escuela de la señora Gregoria Díaz, e

Mi respuesta a unos amigos muy versados

Mi respuesta a unos amigos muy versados                                                   Por Eduardo Correa Esto sucedió hace tiempo y es ahora cuando me ocupo de intentar una especie de respuesta a unos amigos versados que sostenían o sostienen (en verdad tengo algunos años que no he vuelto a verlos ni mucho menos intimar con ellos) la tesis de que mis poemas escritos en forma de rimas contenidas en cuartetos y sextetos no era poesía. Y yo nunca me hice eco de esos rumores ni siquiera cuando una vez uno de ellos me increpó, y me dijo: “Eduardo, por ahí dicen que tú eres poeta, ¿es cierto eso? Y en un tono medio vacilante, tal vez por la pregunta inesperada que pocas veces había escuchado, lo negué de modo radical: “No, hermano, de ninguna manera, ¿poeta yo? Que va, ¿y a quien se le ocurrió semejante despropósito? El amigo respondió sin mostrar interés alguno: “No sé, por ahí comentan”. Ya yo tenía alojado en mi cerebro lo que esta misma gente sostenía respecto de un ami